Vacíos

A lo largo de la vida son muchas las personas que entran y se van, al irse algunas causas vacíos más grande que otras a las que ni siquiera echamos de menos... pero ahora que ha pasado un año que te has ido me doy cuenta de que el vacío que dejaste sigue igual, hay días en el que no es tan notable como otros días pero el problema es que siempre está ese vacío en mi pecho, en mi mente.
Y es que el problema realmente esta ahí, en mi mente, y es que la mía en estos momentos está saturada, no se como plasmar con palabras todos los sentimientos que causan en mi mente tu nombre, ese nombre, ese nombre con el que antes compartía infinidad de momentos, algunos de risas y otros un tanto duros pero al fin y al cabo los superábamos juntos, pero tu nombre ya no me ayuda, ya no me hace feliz, ya no sonrió al escucharlo... todo lo contrario ahora es el nombre que produce un vacío en mi pecho... y todo esto es simplemente porque te echo de menos.

Cambios

¿Cómo puedo salir de aquí?  ?Cómo puedo desatarme de estos pensamientos que poco a poco van apagando la alegría de mi rostro?, esa sonrisa que poco a poco va desapareciendo, quiero recuperarla, y por mucho que lo intente incluso que fijan ser feliz, no puedo llegar a serlo, me falta esa cosa que día tras día la tienes entre tus brazos, esa cosa que está en tu mente todo el tiempo, en cualquier momento y que no te deja desconectar y admitámoslo, esa cosa no es una cosa es algo, es un alguien.

Son muchas las veces en las que pienso que necesito un cambio, que quiero un cambio pero muy sé que no me estoy esforzando en conseguirlo… tal vez porque hay cambios que dan miedo, da miedo cambiar, perder lo que ya tienes por algo que no sabes si lo vas a tener va a ser mejor o peor de lo que ya tienes, pero… ¿a caso la vida no trata de arriesgarse? Alguien dijo una vez  “el que no arriesga no gana” y tanto miedo nos da perder algo que ni siquiera te hace del todo feliz, deberíamos arriesgarnos, vivir locuras, ser felices, hacer el payaso, ser nosotros mismos, deberíamos hacer lo que nos apeteciera en cada momento y arriesgarnos así a que la gente nos mire, que nos juzgue, pero al fin y al cabo, que más da, simplemente se trata de arriesgarse. 

Ahogada en mis pensamientos

Y aquí está, volviendo a pasar, estoy bloqueada, asustada, triste, no sé qué hacer ni a donde ir, ni a quien hablar, ni siquiera tengo muy claro quién soy… estoy nadando sin rumbo en un mar que no me pertenece, en un mar donde no debería estar, tal vez me acabe ahogando como la última vez, me ahogaré por mis propias lágrimas que corren arriesgadas por mis mejillas, y así como las lágrimas salen disparatadas por mis ojos, las olas de los recuerdos son cada vez más fuertes, cada vez más continuas, y estallan dolorosamente contra mi cuerpo, hundiéndome, no dejándome respirar ni procesar todo lo que está ocurriendo, estoy atrapada bajo las olas de mis propios recuerdos, pero lo peor es que esos recuerdos son fruto de mi imaginación, realmente los recuerdos que yo tengo no son lo que de verdad pasó.

Me siento infinita

Hay veces en las que necesitamos correr, huir de eso, de esas personas que nos hacen daño, huir de esos recuerdos que están plasmados en nuestra mente y que no nos dejan seguir adelante.
Hay veces en los que por mucho que corramos no podemos olvidar esa historia triste que nos llena la mejilla de lágrimas, esas historia que no nos deja respirar, ni volver a plantar recuerdos nuevos. Pero es ahora escuchando esta canción, recordando aquel momento en el que la arena y el agua se unían bajo mis pies, en el que tú sonreías y me mirabas, aquel momento en el que por fin éramos libres aunque solo fuera por unos segundos. Es ahora, recordando ese momento cuando por fin me siento infinita.